El comportamiento explicado
El comportamiento de amasar en gatos es un fenómeno fascinante que se remonta a sus ancestros salvajes. Este instinto, conocido científicamente como «kneading«, se observa con frecuencia en gatos domésticos y está profundamente arraigado en su historia evolutiva. Desde una edad temprana, los gatitos amasan el abdomen de su madre mientras se alimentan. Esta acción no solo proporciona un masaje que estimula la producción de leche, sino que también les brinda una sensación de seguridad y confort en un momento crucial de su desarrollo. Este vínculo emocional con su madre establece una base fuerte que perdura a lo largo de su vida.
Con el paso del tiempo, este comportamiento de amasado no desaparece; en cambio, se transforma en un signo de bienestar y tranquilidad en gatos adultos. Cuando un gato amasa sobre una superficie blanda, como una manta o una almohada, no solo está reviviendo un comportamiento instintivo asociado a su etapa de lactancia, sino que también está expresando su contento y su deseo de crear un entorno seguro. Este proceso también está relacionado con la marcación territorial, ya que las almohadillas de sus patas contienen glándulas que liberan olores, lo que permite a los felinos marcar su espacio.
Significado emocional del amasado en gatos
Para muchos, este acto es un símbolo de afecto y bienestar. Cuando un gato amasa, comúnmente con sus patas delanteras, a menudo es un indicio de que se siente seguro y cómodo en su entorno, especialmente en presencia de sus dueños. Esta conducta puede interpretarse como un intento del felino de establecer una conexión emocional más profunda con su humano, manifestando un sentido de pertenencia y afecto.
Desde una perspectiva emocional, el amasado puede ser un comportamiento reconfortante asociado a la etapa de cachorro, cuando los gatos amasan a su madre mientras son amamantados. Esta acción no solo proporciona placer físico, sino que también promueve la liberación de endorfinas en el cerebro del gato, lo que refuerza su sensación de bienestar. A medida que los gatos crecen, muchos continúan con esta conducta, utilizando el amasado como una forma de aliviar el estrés o la ansiedad en momentos de agitación o incertidumbre.
Además, este comportamiento puede fortalecer el vínculo entre el gato y su propietario. Cuando un felino amasa sobre las piernas o el regazo de su dueño, está mostrando confianza y afecto. Este tipo de interacción puede ser sumamente importante para crear un sentido de unión entre el gato y su humano. A través del amasado, los gatos comunican su satisfacción y felicidad, y esta práctica se convierte en una expresión tangible del afecto que sienten por aquellos a quienes consideran parte de su «manada».
Curiosidades sobre el amasado en gatos
El comportamiento de amasar en gatos es un fenómeno que ha fascinado tanto a dueños como a expertos en felinos. Este acto, que muchos pueden observar con cariño cuando sus gatos se acomodan sobre una superficie blanda, tiene diversas intensidades y formas de ejecución. Algunos gatos amasan con gran energía, utilizando sus patas delanteras de manera rítmica, mientras que otros prefieren un amasado más suave y delicado, casi como si estuvieran palpando su entorno. Esta variedad refleja la personalidad de cada gato, así como sus preferencias individuales.
Una de las curiosidades más notables es que la mayoría de los gatos tienen áreas y materiales preferidos para llevar a cabo este comportamiento. Muchos optan por almohadas, mantas o incluso las piernas de sus dueños. Estos espacios suaves y acogedores no solo les brindan comodidad, sino que también pueden ser considerados por los felinos como lugares seguros donde se sienten protegidos.
Además, existen casos inusuales y sorprendentes de gatos que han dejado perplejos a sus dueños con sus elecciones al amasar. Por ejemplo, hay felinos que parecen preferir hacerlo sobre objetos inusuales como bolsas de papel o superficies ásperas, todo lo cual puede despertar la curiosidad de sus humanos.
