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Procesionaria del pino – Todo lo que debes saber

¿Qué es la Procesionaria del Pino?

La Procesionaria del Pino, habita en los pinos de los bosques de Europa, en el norte de África, Asia y América del Sur, siendo considerada la plaga forestal más extendida. Es una especie de lepidóptero defoliador (familia Thaumetopoeidae). El término “defoliador” hace referencia a que causa la caída de las hojas de los árboles. Estas orugas (larvas) están cubiertas de pelos urticantes (en los que contienen una toxina termolábil denominada Thaumotopina) que se desprenden y flotan en el aire, causando irritación en oídos, nariz y garganta en las personas, así como graves reacciones alérgicas. Siendo consideradas también un peligro para los niños y un problema de salud pública. Aunque para los perros pueden llegar a ser incluso algo mortal por la inflamación de las vías respiratorias.

La bajada de esta oruga ocurre durante los meses de febrero y marzo, cuando el invierno acaba y empiezan a aumentar las temperaturas. Por lo que es habitual encontrar ya largas hileras de estas llamativas orugas que buscan un lugar donde empezar su metamorfosis. Su ciclo vital se forma por varias fases:

  • Huevo: Las polillas adultas ponen durante el mes de julio los huevos sobre los pinos, estos eclosionan tras 30 o 40 días, dando lugar a larvas.
  • Larva: Aparecen durante los meses de agosto o septiembre y se alimentan de las hojas de los pinos. Al llegar el frío, construyen nidos de seda blanca para mantenerse protegidas del invierno y las bajas temperaturas.
  • Crisálida: Cuando acaba el invierno, durante febrero y abril, las larvas descienden al suelo (por ello vemos las procesiones de orugas frecuentemente) para enterrarse y pasar a la etapa de crisálida.
  • Mariposa adulta: Finalmente emergen como mariposas nocturnas de color gris ceniza. Cada hembra pone de 150 a 300 huevos sobre las hojas de los pinos.

¿Por qué son tan peligrosas estas orugas?

Estas orugas tienen, como ya hemos dicho, unos pelos urticantes (tricomas) y cada ejemplar cuenta con unos 500.000, los cuales se liberan con facilidad, flotando por el aire. Causando reacciones alérgicas graves e irritaciones a las personas. Si un perro entra en contacto con estas orugas, ya sea oliéndolas, lamiéndolas o si se las come, pueden presentar signos clínicos de intoxicación, así como inflamación de las vías respiratorias, en casos muy graves pueden tener úlceras y acabar siendo incluso mortal para el perro. Además, estas orugas también afectan a los árboles provocando la caída de sus hojas al alimentarse de ellas, lo cual debilita a los pinos de manera progresiva.

Síntomas de intoxicación en nuestros perros

Si un perro entra en contacto de cualquier forma con estas larvas, es habitual que presenten problemas respiratorios, irritación facial o en las patas, así como ocular. En caso de entrar en contacto con la boca del perro puede causar daños en la lengua, desde úlceras y erosiones hasta necrosis (muerte del tejido). Los síntomas que aparecen en perros con una mayor frecuencia son:

  • Salivación excesiva.
  • Dolor en la boca y/o lesiones en la lengua.
  • Estado de nerviosismo.
  • Irritación en cara, extremidades o lengua, entre otras zonas. (Tendrán un aspecto hinchado)
  • Urticaria.
  • Dificultad respiratoria.
  • Shock, en casos muy graves.

¿Cómo actuar si mi perro entra en contacto con ellas?

Es muy importante actuar rápidamente si se sospecha que nuestro perro ha estado en contacto con la procesionaria del pino, debes buscar atención veterinaria urgente para tratar los síntomas cuanto antes y reducir el riesgo para la salud de tu mascota. Además, es aconsejable lavar con agua templada las zonas afectadas para reducir el efecto de la toxina, ya que el agua desnaturaliza las vellosidades urticantes.

Tratamientos más frecuentes en perros

El veterinario evaluará cada situación en particular y según el estado del animal optará por un tratamiento u otro. En casos más leves, se puede aplicar corticoides de rápida acción (reducen la inflamación) y en casos más graves se pueden administrar antihistamínicos para tratar la reacción alérgica. Además puede necesitar antibióticos e incluso ser necesaria la provocación del vómito.

Es esencial la actuación veterinaria inmediata en caso de intoxicación, ya que puede llegar a ser mortal para el perro debido a la inflamación de las vías respiratorias.

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